Los participantes visitaron Alpera, perteneciente a la comarca de Monte Ibérico-Corredor de Almansa, en una ruta que da el pistoletazo de salida a esta VII edición 2020, con 43 citas programadas.
Denominada “Ruta de la Dehesa del Monte Pinar”, con una dificultad técnica media, un recorrido circular, con unos 15 kilómetros de distancia y unas cinco horas de duración.
Al norte del término municipal de Alpera se extiende el paraje de La Dehesa, poblado de frondosos pinares, carrascas y monte bajo, con una altitud de unos 1.000 metros. Surcada por vallejos y ramblas que le confieren una orografía característica, en la que habitan una gran variedad de animales de todo tipo. Podemos decir que es la zona de mayor riqueza natural de todo el término además de los bellos rincones y paisajes que podemos encontrar.
Comenzaba el día soleado, aunque con frío. Tras el café en Alpera, los 50 participantes se desplazaron en autobús hasta el Albergue Casilla de los Peones, una antigua casilla de peones camineros que se ha rehabilitado para su uso como albergue de naturaleza, situado junto a la carretera de Alpera hacia Alcalá del Júcar (CM 3201 km. 80). Acompañados por Manuel Iniesta, teniente alcalde del Ayuntamiento de Alpera, y guiados por los amigos del “Club Veredas y Caminos de Alpera” arrancaron sobre las 9.30 de la mañana.
Primero por un camino que iba ascendiendo en dirección al parque eólico de La Zarzuela. En este punto se ven unas bonitas panorámicas de las sierras próximas. Una vez arriba abandonaron este camino para coger otro que salía a mano izquierda, en descenso hasta llegar al vallejo de Gil, recorrieron de este valle un tramo, para más adelante ir ascendiendo por caminos y cortafuegos flanqueados de pinares y encinas. Atravesaron otros dos vallejos y ramblas antes de cruzar la carretera para llegar a la casa de la Dehesa, donde se instalan retenes de incendios y cuenta con un helipuerto. Desde aquí se cogieron el camino del vallejo de la fuente Olaya para llegar hasta el enebro de la Dehesa, una joya botánica cuya edad se estima en 1.000 años. Situado junto al camino se puede ver claramente las grandes dimensiones de su tronco y ramas principales.
El camino continuaba por el barranco de Lino y terminaba en la pista de la cañada de Pajares compartiendo un pequeño tramo de la Ruta de la Lana (ruta Jacobea de Alicante a Burgos). Aunque hacia un sol espectacular, con incluso calor, pasaron por un gran abrevadero con una capa de varios centímetros de hielo, y en las zonas de umbría todavía hacia fresco. Desde aquí ya de vuelta por un camino que les conduciría al otro lado de la carretera del albergue donde comenzaron y finalizaron la ruta.
Una vez allí les esperaban unos sabrosos gazpachos y carne a la brasa, además de una cata de los ricos vinos de la Bodega “Santa Cruz” de Alpera.
Preciosa ruta, en un soleado día, que ha hecho disfrutar a los 50 participantes de esta actividad, de las maravillas de entornos naturales que esconden nuestros municipios, gracias a la iniciativa de la Diputación Provincial de Albacete.
La próxima cita será el próximo domingo, 23 de enero, en Almansa, denominada “Campo de Batalla del 25 de abril de 1707”. Una ruta circular, de 12 kilómetros de distancia, de una dificultad media, una duración aproximada de 3 horas y con salida a las 10:30 horas desde Oficina de Turismo municipio.
